martes, 29 de septiembre de 2009

Palacio Municipal today, Lista de Ligas and more...



Son las 21hs del martes 29 de septiembre, hace unos minutos llegué a mi casa del super chino y empecé a ordenar papeles, papeles que tenía en el bolso desde el fin de semana y que había empezado a ordenar este mediodía, en la larga cola en la que me encontraba para pagar un impuesto y en donde un niño eufórico y su mamá -quejosa e intolerante-, terminaron captando toda mi atención.
Entré al Palacio Municipal y me puse en la fila. Jamás hubiera imaginado que pensaría en WHAM!Un niño corría por el pasillo con los brazos abiertos, chocaba con piernas de la fila para la caja, volvía a tomar envión. Su mamá discutía sobre no se cuántos centímetros cuadrados en el mostrador, alzaba la voz e iba a buscar al niño que a su vez se le volvía a escapar mientras ella, en su búsqueda seguía gritando para que la escucháramos todos y temiéramos ante el diabólico catasto municipal. Se trataba de Gracie, una otrora adolescente, fanática de WHAM!, que fue conmigo a primero y segundo año, al menos.
No la reconocí al principio, recién cuando retornó al mostrador para seguir discutiendo, empecé a sospechar que conocía a esa mujer de alguna parte. De hecho estuve en su fiesta de 15 como invitado y llevé la música para bailar aquel día en dos cassettes TDK enganchados, uno de 60 minutos y otro de 120. Fue una fiesta muy sencilla, un sábado a la tarde con mucho sol, tipo asalto, con mucha familia de raíces italianas, me acuerdo de ese detalle porque me lamentaba no haber grabado aparte, en otro cassette, un par de tarantelas. También me acuerdo el arranque del Lado A del TDK de 60 (Abría inevitablemente con Faith de George Michael, seguía con Rick Astley Never gonna give you up y el Everywhere de Fleetwood Mac…) y de un potente radio doble grabador colocado en una mesita del parque. Vivía bastante alejada del centro de San Miguel, cerca del cruce de Castelar, en la San Miguel Profunda, donde los vecinos en la hiperinflación patentaron las barricadas suburbanas. La mayoría del curso no fue a la fiesta porque la semana anterior habían degollado por un sachet de leche a un pasajero de la línea 203 o 365 y fue la noticia de la semana que sin dudas repercutió en la convocatoria. La casa quedaba alrededor de un gran descampado. A unas cuadras de la casa pasó lo del homicidio, fue en una esquina. Gracie la llamaba “Una esquina diferente” como la canción de WHAM! En realidad se encargaba siempre de aclarar al que quisiera oir que “Una esquina diferente” era de George Michael solista, como así también “Murmullo descuidado”., aunque aparecieran en los discos de WHAM! Le preocupaba mucho esa cuestión, el futuro de Andrew Ridgeley (la otra mitad del dúo) y fundamentalmente conocer China en algún momento de su vida por la sencilla razón que WHAM! había tocado ahí y habría muchos fans como ella para compartir fotos y chimentos. No alcancé a saludarla este mediodía porque se fue del Palacio Municipal refunfuñando con su nene a cuestas –que hacía una especie de ala delta muy gracioso con vuelta carnero incluida-. Curiosamente había pensado en su fiesta 15 el sábado pasado (26/09) mientras trabajaba en un casamiento, en el casamiento de Leandro y Lourdes donde me entregaron una lista de ligas para que fuera anunciando. 24 Ligas en este orden:

1) Oscar // MaHelena
2) Luchy// Romina Bon
3) Gustavo// Carolina Barri
4) Claudio// Melisa
5) Sebastián//Romina Rod
6) Matías Veloz// Rocío
7) Cristian Blan// Paola
8) Christian Ore// Yani
9) Matías// Nativez
10) Chris Caligari// Lilly
11) Andrés// Daniela
12) Nicolás// Nataly
13) Sebastián// Mariela
14) Victor// Carolina
15) Sergio//Laura
16) Luis// Irene
17) Juan// Natalia
18) Matías// Cecilia
19) Ariel//Verónica
20) Pablo// Analía
21) Rolo// Gaby
22) Sergio// MaAmelia
23) Luchy// Lucía
24) Leandro//Lourdes
(Lourdes la tira para los varones solteros y después fotos: Leandro con todas las solteras y Lourdes con todos los varones)

Hacía rato que no me tocaba anunciar liga por liga y bastante que no me topaba con la ceremonia de ligas. Salvo que entremos ante un brote primaveral de revival liga, viene en desuso. 66 Ligas fue lo máximo que recuerdo haber musicalizado entre “Puedes dejarte el sombreo puesto”, el disco de Las Gatitas de Porcel y el “No eres mi dueño” de The Blow Monkeys, una noche en los salones de Los Cedros (otra fiesta grande de la que les hablaré en otro momento). Lo que pasa con las ligas es que si no se hace dinámico se pierde mucho tiempo y la gente se aburre. No fue el caso del casamiento del sábado. Iba anunciado a los trotes, por ejemplo: a medida que agarraba las copas de agua MaHelena, ya estaba anunciado que se acercara Romina Bon. La ayuda de Leandro, el novio, fue importante en la arenga y en la localización de los nombres que se escondían… ¿Qué tiene que ver todo esto con Gracie y sus 15? Bien, tiene que ver porque entre “Me gustas mucho” de Viejas Locas, “Rock del Gato” de Los Ratones Paranoicos y algunos viejos Blues, puse I want your sex de George Michael y luego arranqué con el Carnaval Carioca (ritual del que les hablaré largo y tendido en algunos posteos venideros). Esto es todo por hoy. Dulces sueños y Buen miércoles! Continuará…

Pd: Este jueves 1 de octubre voy a leer en la Casa de la Lectura y el sábado 3 en la Librería Cobra (subiré en breve toda la info)

Nicolás

viernes, 18 de septiembre de 2009

En vísperas de nueva primavera, tras días grises...

Estamos ya inmersos en otro nuevo fin de semana, de cara a la primavera que viene llegando, con un estado climático más alentador respecto a las precipitaciones, lloviznas, vientos y mucho frío de días pasados aunque seguirá fresco. Dato este garantizado por el servivio meteorológico nacional al que acabo de consultar, dado que esta noche trabajaré en una fiesta de 15 como disc-jockey, mi trabajo desde hace muchos pero muchos años. Poco y nada suelo escribir sobre eso: sobre el pasar música, sobre ser un jinete del disco desde antaño, desde antes que a los disc-jockeys los llamaran por aquí dee jays, y proliferaran por todas partes antecedidos por la d y la j. Nunca escribí sin embargo que suelo consultar llegando al fin de semana el SMN para preveer algunos infortuitos e imprevistos en mi lavoro de fiestas y estar a tono cuando los mâitres y familiares más cercanos de los agasajados de turno, empiezan a inquietarse al ver que el cielo no está despejado y empieza a correr un vientito...
Recuerdo un mediodía de sol radiante -como el que veo este sábado 19 de septiembre a las 12:03 entrar por mi ventana-, en una quinta enorme y fastuosamente rancia por la zona de Castelar, una fiesta de casamiento al mediodía para 300 personas. El sol quemaba a media mañana pero de a poco empezó a nublarse, no habían previsto los padrinos contratar una carpa gigante por si acaso lloviese o hubiera mal clima. Tampoco sé si hubieran conseguido tan facilmente una carpa. Ni hablemos de baños químicos. El rubro eventos estaba en pañales, lejos del emporio que conocemos actualmente y creo que se dejaba en manos de Dios o de la Madre Naturaleza o librado a la buena suerte esas cuestiones climáticas con tal de cumplir con el rigor y el deber de los festejos. Los novios de aquella fiesta se casaron en una Iglesia por la zona de San Telmo y desde allí -despues de saludar en el ingambeteable atrio- vinieron en caravana junto al resto de los invitados hacia la quinta donde los estábamos esperando (¿Ya existía la Autopista del Oeste?). No existían los celulares, los compact discs, las canciones no se bajaban en un par de minutos por Internet y si había computadoras en algunos hogares serían Commodores 64 para jugar. Había dejado yo correr el disco Vibraciones Trasnoche 86, sonaba Steady de Jules Shear, cuando vi al parrillero y a su ayudante desesperados con dos cajas dirigiéndose al portón de entrada. Hacían señas con sus brazos - y levantaban unas cajas que resultaron ser de sal Dos Anclas- llamando a todo el personal que había venido a trabajar desde muy temprano y que esperaban con todo listo, el arribo del malón hambriento de invitados. Hacían señas como si hubieran llegado hasta la orilla del mar y pedían el auxilio del bañero porque vieron a alguien ahogándose y no lo podían salvar por su cuenta. Señas a los mozos, a mi, a los plomos-ayudantes-amigos-compañeros de colegio que me acompañaban entonces, a los caseros del lugar... Todos corrimos al portón de entrada ante la inclemencia de sus señas. Tomó la palabra el experimentado parrillero: "Va a llover en ratito, viene tormenta pa´cá. ¡Catástrofe, Ca-tás-trofe!". Su jóven ayudante intentó calmarlo un poco y nos dijo: "Lloverá. Sólo nos queda intentar una macumba a conciencia. No se rían. Lo aprendí en un campamento trabajando con una colonia de vacaciones y dió muy buenos resultados. Habíamos acampado al borde de un río y estábamos destinados a una tragedia con muchos niños ahogados, muertos, desparecidos y con pocos sobrevivientes. Funcionó aquella vez y funcionará ahora con la energía y buena predisposición de todos ustedes". El día estaba gris, a punto de largarse a llorar - como veo ahora a las 13:41 en este 19 de septiembre desde mi ventana-. Nos mirábamos entre todos atónitos, mirábamos las 30 mesas redondas perfectamente armadas, mis bafles -las bandejas Technics, potencia David Hafler, mixer Numark 1650 y cajones de discos estaban de milagro, debajo de una galería cubierta porque no me alcanzaba el cable de 220 para montar la cabina entre dos eucalíptus gigantes- y vislumbrábamos ya el caos que se avecinaría en breve. El ayudante del parrillero nos hizo colocar en círculo, dijo unas palabras raras y sin salirse del interior del círculo añadió que giráramos en dirección inversa a él. Iba tirando sal al pasto y con un jeringozo notable que emitía de su boca, marcó el ritmo acompasado de la ronda. Por un momento pensé en los azerrines volcados sobre las áreas de canchas de fútbol para que los partidos impostergables se jueguen. Cuando dió por terminada su labor, nos pidió que hiciéramos una reverencia al pasto, otra al cielo y que nos dispersáramos rápido a cada uno de nuestros puestos de trabajo. La ceremonia capitaneada por él para impedir la tormenta, fracasó rotundamente. Media hora después -todavía sin estar los invitados presentes-, se largó a llover en forma torrencial. El estoicismo del mâitre en ese momento fue formidable. Frenó algunos impulsos vanos de su personal por levantar la vajilla de las mesas y decretó para el recuerdo esta sentencia: Serviremos choripan, morcipan y vacío al pan en mano. Tranquilidad y mesura. No hay lugar adónde ir. Que los invitados vean que los estábamos esperando con todo en condiciones. Hay que servir. Quiero 2 mozos bandejeando chimichurri, el resto meta bombardeo de sandwiches. Ahora mismo iremos al pueblo por más pan. Recuerden que nos pagan por servir. Hay que servir hoy con barro y con lluvia. Hay que servir al borde de una neumonía. Siempre habrá que servir. Esta es gente muy bondadosa, los conozco de otras fiestas, son clientes, ¡la propina la tenemos asegurada! Después, se dirigió a mi. Yo tenía 15, tal vez 16 años como mucho, no más edad que esa. Miró las bandejas Technics SL-D2 y SL-B1. Justo había puesto con rápida destreza en la SL-D2, el Lado A del Vibraciones Trasnoche 86. Sonaba impoluto el Never Surrender de Corey Hart, seguía lloviendo sin parar en el parque y era imposible augurar nada bueno porque la quinta no tenía lugar para albergar tanta cantidad de gente, salvo su grandioso y vasto parque a horas de convetirse en laguna. El mâitre se distrajo frente a la tapa del disco (una modelo sonriente, vestida de fiesta, recostada sobre una barca con fondo empedrado) e instantes después me dijo: ¿Y vos pibe?, ¿qué me contás? ¡vas a tener que iluminarte con tus disquitos! Vas a tener que ganarte el mango hoy como nunca y más que ninguno de nosotros! Todos nos vamos a apoyar en vos hoy. Yo, mis mozos, el parrillero, su macumba imbécil, los novios y los invitados que están viniendo para acá y en cualquier momento llegan desesperados. ¡Todos!, ¡entendiste pibe! ¿Querés que te lo repita por si no me escuchaste bien? Siempre nos vamos a apoyar en vos aunque no nos crucemos nunca más en la vida. Hoy, mañana, pasado mañana y en el futuro: el éxito de las fiesta quedará en tus manos. Creo que no me estás escuchando bien. Te lo resumo para que te expliquen tus amigos sinó: Por más mejor morfi y chupi del bueno que haya, el éxito de la fiesta está en tus manos, sólo en tus manos.
No sé por qué mantuve hasta ahora demasiado disociado de la escritura mis reportes sobre fiestas, con que a veces suelo acaparar la atención en reuniones de amigos y animarlas por un rato. Este es un intento de conectar y conciliarme por escrito con mi trabajo desde que era adolescente: pasar música en fiestas, disc-jockey, dj, cómo a ustedes más les guste.
Anoche fui a la inauguración de la muestra de Lucila Poisson en Sofitel por la calle Arroyo, -a metros de una galería donde estuvo Big Bear Records- y cuando estaba saliendo a la calle, me crucé con Jose (así, sin acento), ex colega dj, que también había ido a ver los laboriosos hilados en los "Poemas Subyacentes", aún por descubrir y redescubrir. Hablamos 5 minutos. De sus discos -todavía los tiene-, de sus equipos -los vendió y algunas cosas volvió a comprar-, de los tiempos del club, de voley, de fiestas en La Casona para El Nacional o en la casa de Carla o Georgina para sus quinces y de enganches que hacía, canciones que enganchaba, que le recordé y ya no recordaba. Jose me comentó que mañana, por hoy, con Pablo y Diego, otros históricos jinetes, pasaban música en una fiesta retro de los 80 en un bar rugby. Quedé en pasar a saludarlos si mi fiesta de 15 terminaba temprano, lo dudo realmente. La quinceañera de esta noche se llama Sofía y entrará con una canción de Tiziano Ferro. Los novios de aquella fiesta por Zona Oeste entraron con el tema de amor de la película Dirty Dancing, (I´ve had) The time of my life , que era el tema hit del momento. Jose fue el primero que tuvo esa canción, en un simple importado de 45 RPM y la usaba a veces para largar el baile y otras para cortar los lentos. En aquella fiesta, corté la música a medianoche, seguía lloviendo a cántaros pero nadie maldecía ya a la lluvia. Era hora de cerrar, es hora de ir cerrando -17:03 del ya despejado sábado 19 de septiembre-. Agarré el micrófono y anuncié un último tema -otra vez El tiempo de mi vida-. Quedaban un poco más de 50 personas cuyo deseo era que la fiesta no terminara nunca, adentrándose durante casi los últimos 5 minutos, en el baile más sucio que se puedan imaginar.
¡Feliz Primavera!
Nicolás

viernes, 11 de septiembre de 2009

Este sábado 12 en el CCBorges y mañana domingo 13 en la FLA...


Estaré compartiendo una mesa de lectura junto a Paz Levinson, Alfonsina Brión, Mercedes Villalba y Carolina Pellejero, esta tarde de sábado, a las 18hs, en la Sala 23 del Contemporáneo CCBorges (Viamonte esquina San Martín, Ciudad de Buenos Aires), dentro de las actividades de Viajo y Un Vagón Hermoso , redes de cooperación, vínculos y amistad, oriundas de Médanos y Mayor Buratovich. Seguramente vaya a leer algunos fragmentos de "Médanos y otros lugares" (versión amplificada de la plaquette Tan Breve Música editada por Guillermo Ueno, que se presentó en el CCBorges (noviembre del 2005) y del fragmento aparecido posteriormente, en septiembre de 2006, en el número 3 de la revista SEDE). Dicen los chicos de Viajo al respecto de la muestra: Un vagón hermoso y nosotros ya somos como proyectos hermanos, nos gustan cosas parecidas; vivimos en pueblos cercanos. Venimos de un mismo paisaje. Vengan!

SABADO 12
18:00 hs Lectura de poesía: Paz Levinson, Nicolás Dominguez Bedini, Alfonsina Brión,
Mercedes Villalba y Carolina Pellejero.
19:30 hs Recital de Alan Courtis.
LAS ACTIVIDADES DE LA AGENDA
SON ABIERTAS A TODO EL PUBLICO y GRATUITAS, vengan!
***

Mañana, domingo 13 de septiembre, estaré como invitado de Carlos Alonso, en su show "en estado azul". Carlos Alonso en estado azul, se tituló su visita al programa 142 de El Monte Análogo radio y que pueden escuchar en los archivos de unaradio o en el blog del Monte. El Monte se interrumpió abruptamente como la novela de René Daumal en que se inspiró para las aventuras con micrófono abierto. Mañana, en la FLA (Brasil 1551, Constitutción) improvisaré en algún momento sobre aquellos saltos al vacío tan característicos de los montañeses para que no se disipe la energía que nos queda y tendré a mano libros de mi importancia a los que a lo mejor vuelva a repasar en voz alta. Nos estamos viendo hoy o mañana, mañana y hoy o próximamente...!

¡Buen fin de semana!
Nicolás

CICLO EU!ZiNE
CARLOS ALONSO

EN ESTADO AZUL. INVITADOS: DR. RADIOKAOSS, EL MAESTRO
CONTURSI EN BATERIA Y EL MONTEANALOGO EN POESIA.
FUSIBLES
LO FI DE TERCERA DIMENSIÓN
ÜL
MULTICORDE ESTRIDENCIAL
+ FERIA INDEPENDIENTE

DOMINGO 13 / 09, 19 HS.
FEDERACIÓN LIBERTARIA ARGENTINA
BRASIL 1551, CONSTITUCIÓN.
ENTRADA LIBRE

Me ha quedado este hermoso espacio en blanco
la foto del evento de esta tarde muy chiquita
dos invitaciones en un posteo demasiado espaciado
con 11 links donde hacer clic! Demasiado.
Bienvenidos al posteo del martes 8 un poquito más abajo.
Saludos y salud universal!
N.

El martes 8 que pasó...













¡Qué experiencia!
Me sentí muy a gusto con su charla. Con su trato hacia nosotros. Sería lindo que vuelva un día y sigamos leyendo, escuchando y mirando libros. Intercambiando opiniones…Gracias Totales
(de paso cito a uno de mis ídolos, Cerati) por su tiempo y dedicación.
M.


El martes pasado estuve en el Instituto Dr. Nicolás Avellaneda de la localidad de Ingeniero Maschwictz. Fui invitado por el docente y artista Federico Durand, a los cursos de 1ero, 2do y 3ero Polimodal de turno mañana donde él dicta la materia Lengua, Cultura y Comunicación. La idea inicial era que yo leyera algunos de mis poemas y que luego los alumnos me hicieran preguntas en el caso de que las tuvieran. Yo acepté gustoso la invitación de Federico pero a medida que se acercaba la fecha me empezó a dar vueltas en la cabeza que podría ser una buena oportunidad para preparar una clase, una clase que fuera un poco distinta, una clase sobre poesía y música, de otrora Cultura Rock – de donde proviene todo mi imaginario omnívoro-, en definitiva.
“Siempre me inquietaba cuando iba a los festivales de cine, terminaba la película que había ido a ver y anunciaban la presencia del director en la sala para recibir preguntas del público…”, más o menos ese fue mi preámbulo para contarle al Profesor Durand, qué tenía entre manos y si cabía la posibilidad de llevarse acabo en las aulas donde ejerce. Me encontré con un entusiasta ¡SIIIIIIIIÍ!, desde el otro lado del teléfono, cómo hacía rato que no estaba acostumbrado a escuchar y quedamos al día siguiente en seleccionar un juego de textos para que sus alumnos fotocopiaran en el mismo Instituto y así siguieran mejor la clase. ¿Qué tenía yo entre manos? Por mi parte, llevar en una valija con rueditas muchos libros, algunos fanzines, cassetes, revistas, compacts dics, cdrs y un par de discos de 33 RPM para desparramar sobre varias mesas e ir pasándolos por el aula, haciéndolos circular como si estuviera en una fiesta oficiando de dj -mi trabajo desde que tenía 15 años - y el alumnado fuera el centro de una exigente pista de baile, a la que hay que sorprender canción tras canción. Arrancamos cerca de las 9 con la música de Velvet Underground, la voz de Nico nunca tan oportuna, saliendo por el radiograbador portátil, para clarear la luz nublada que entraba por la ventana del aula. Enseguida nomás mencioné Las Cartas de amor de Cachorro Maiakovsky a Lili Brik y así seguimos, entre enganches imposibles: Los Indios Chimames con Perdedores Pop, Bee Gees tras Ezra Pound, Augusto de Campos vs. Morrisey…Fui abriendo el cuerpo de notas de Decirte de oído en vivo y en directo, embarrándome como a ambos costados de la colectora. Algunas preguntas dispararon hacia lugares y confesiones insospechadas, hubo poemas que no tenía en mis planes leer y leí sorprendido ante pedidos entusiastas. ¿El Poema Hit? Nunca des por deshauciado a un conejito en los tres cursos por unanimidad. Hit que aproveché para linkear a Echo & the Bunnymen y jugar con la pregunta What are you going to do with your life? mientras sonaban los primeros compases de History Chimes. ¡Vaya que valió la pena, sacar a pasear apretujados en una valija, a aquellos objetos queridos, viejos compañeros de ruta, arriba del 176 ida y vuelta, en aquel día de lluvia y frío!
En el último recreo, cuando volvía de la Sala de Profesores, me interceptó a punto de entrar al aula de 3ero –lo que antes era quinto año-, un chico de 1ero o de 2do. Me entregó una hoja de carpeta doblada en cuatro partes, escrita en lápiz negro. Mejor léala en el camino de vuelta a su casa, escribí todo apurado, disculpe si encuentra faltas ortográficas o poca coherencia, gracias por venir, me dijo, antes de perderse de vuelta con los suyos en el patio tras el timbre. No sabía que iría a utilizar un fragmento de su carta como epígrafe para este posteo nuevo, en día viernes sin clases por el Día del Maestro. Para ir terminando, quería volverle a agradecer una vez más a Federico Durand por la invitación y a todo 1ero, 2do y 3ero Polimodal Turno Mañana del Instituto Dr. Nicolás Avellaneda por su atenta atención y la experiencia compartida.

Pd: ¡Feliz viaje de egresados a los de 3ero que parten para Bariloche el próximo lunes !

sábado, 5 de septiembre de 2009

Este primer sábado de septiembre, lanzamiento BF...


La Música del Barbijo

El martes pasado comenzó el mes de Septiembre. Primero de Septiembre, cayó esta vez martes en el almanaque. Pude agarrar el último subte que partía de Leandro. N. Alem, hacia Dorrego o Federico Lacroze. Desde algunas de esas paradas, pensaba tomar el tren (San Martín o Trencito Urquiza) y regresar por fin a mi casa. Había sido un martes muy largo y me sentía más introspectivo que de costumbre. Septiembre, nunca me resulta indiferente cuando viene llegando y cuando empieza a correr, todo parece familiar, todo parece terminar, todo es igual. Septiembre es cuando el tiempo juega a no decir adiós y todo vuelve a suceder… La cuestión es que me quedé profundamente dormido en el subte, a la altura de Pasteur y me despertaron en Parque Chas, meta zamarreos mientras creía percibir en sueños, gritos y arengas desde el más allá, que no sabía que estaban destinados a mi, a que me levantara de una buena vez, del asiento felpudo donde frito estaba roncando. Tras pasar los molinetes en Chas Station, recordé que en la esquina de Triunvirato y Echeverría, paraba el 176 y me fui encaminando en aquella dirección. El tránsito era nulo, las persianas de los departamentos estaban prácticamente bajas del todo, el empedrado todavía no estaba tan resbaladizo como iría a estar más tarde, la ciudad empezaba a dormirse temprano y ¡esas nubes! nubes estáticas, cubriendo un cielo encapotado encima mío, casi a la altura de las antenas o postes de luz, en estado de flotación, como copos de azúcar eclipsando manzanas acarameladas en cualquier vitrina de carrito ambulante, al acecho de niños cerca.
Ya arriba del bondi, en algún momento donde la Avenida San Martín se aproxima a la General Paz, subieron dos chicas y un chico. Yo venía mirando por la ventanilla salpicada con barro de las alcantarillas, las últimas luces de Capital. Entrar a Provincia y transitar la Ruta 8 significaría perder todo tipo de panorámica con las veredas. Los chicos se sentaron en los asientos libres frente mío y al costado. Les presté suma atención a lo que estaban hablando. Hablaban de algo así como un descenso demográfico en la población Flogger existente. Hablaban de que empezaban a aburrirse de bailar música Electro. Hablaban que tal vez fuera hora de cambiar de bando pero no entendí a qué bando se referían. Eran Floggers cansados del traje de flogger las 24hs del día, a punto de cambiar de look o de tribu. Volvían a sus hogares con mamá, papá, abuelos y hermanos, fuera de hora, tal vez al otro día tenían que ir al colegio o no. Tal vez dormirían poco porque trabajan y no estudian, o hacen las dos cosas o ninguna de ambas y vagan hasta el próximo encuentro nocturno, ¿quién sabe? Bajaron a la altura de la Rotonda de Márquez y siguieron caminando por la banquina hasta que los perdí de vista desde mi ventanilla embarrada, donde volví a apoyar la cabeza.
No encontré el momento para meterme en la conversación de ellos y hablarles sobre la existencia de Barbijo Flogger y a ustedes que llegaron leyendo hasta aquí, en este texto presentación del compilado, tampoco.
El compilado musical Barbijo Flogger – “La Música del Barbijo” sale ahora a la luz, tras unos meses de flotar por la web sin difusión alguna. Pudo aprovechar el impacto que dejaba abierta la emergencia sanitaria, política y del mundo del espectáculo, pero fue armándose pacientemente, pese a que se nutrió de esas notorias “epifanías” que bombardeaba la inmediata realidad. Ahora que las aguas parecen estar un poco más quietas hasta próximo aviso, este puede ser un buen momento para salir a la luz y dar a conocer Barbijo Flogger, donde participan Putch, Laponia, Uno x Uno, Nebulosa, Dchampions, Reina y los Cancheros del Mundo, Plan Austral, Gastón Caba, Travesti, Mueran Humanos y El Monte Análogo. ¡Bienvenidos todos a descubrir, este potente y sustancioso compilado, de música antiviral por excelencia!

Nicolás D. Bedini

01.Henry Flogger por Putch
02.Free Hambre por Laponia
03.Perfectos por Uno x Uno
04.Vanidad Fatal por Nebulosa
05.Golpealo por DChampions
06.Palabras Raras por Reina y los Cancheros del Mundo
07.El Idioma de los Golpes por Plan Austral
08.Diálogo por Gaston Caba (inv. Maxi Prietto)
09.Juventud Residual por Travesti
10.Horas Tristes por Mueran Humanos
11.Nunca fui a Neverland por El Monte Análogo
http://www.barbijoflogger.com.ar/