lunes, 18 de junio de 2012

Un poema del poeta, periodista y ensayista brasilero Cassiano Ricardo (1895-1974) en versión de Helio Orovio:




 El gato y el diccionario

Un gato se aproxima. Tiene hambre.
Abandonado a lo que dios quiera en plena calle.
Dentro de poco, una rueda que significa la esencia del universo, lo aplastará.
Sin que ninguna estrella o flor se mude de lugar.

Lo llamo junto a mí.
Lo caliento con mi sobretodo londinense.
Sus ojos son verdes. Son más verdes
que los de la mujer que lo abandonó en la calle
al pasar en su carro, como una sirena montada en un pez.

Y como (dada mi condición pedestre)
jamás podría poseer un tigre de Bengala,
haré de este gato mosqueado
mi tigre, conservado niño,
para adorno del mundo y de los hombres.
En un final, para el pequeño laberinto ambulante donde vivo,
me basta este minúsculo tigre ornamental.

No puedo tener un cuadro de Van Gogh,
pero tengo una copia.
No puedo tener dos pintarrojos volando por el aire,
pero tengo uno en la mano.
(¿Qué es la infancia sino la alegría de tener una cosa por otra?)

No tengo cosas del bazar de Dios,
pero tengo un diccionario.
No tengo la mujer que vi en el último partido de Jockey,
pero tengo su fotografía.

(¿El secreto de la vida no está en que la gente
se conforme con una cosa por otra?)
En mi diccionario de objetos hallados,
el gato es mi tigre.
(Ah, este gato me dará siempre la ilusión de ser un niño,
aquí,
o un cazador de tigres en África.)

De Poesía Brasileña Siglo XX, Helio Orovio (1986. Cuba: Casa de las Américas. Colección La Honda. Selección, notas, prólogo y traducción Helio Orovio.)



No hay comentarios:

Publicar un comentario