viernes, 28 de mayo de 2021

Carta de Dylan Thomas (Swansea, Gales 1914 - Nueva York, 1953) fechada un día como hoy -28 de mayo-, traducción de Pirí Lugones (Buenos Aires, 1925 -1978)…:

 

















A JOHN MALCOLM BRINNIN

 

                                                                                                                                                                                                                                                                                                                  The Boat House

                                                                                                                    Laugharne,

Carmarthenshire,

                                                                                        Gales

28 de mayo, 1949

 

Estimado John Malcolm Brinnin:

     Permítame antes que nada excusarme por no haber contestado mucho antes su carta. Segundo, agradecérsela sinceramente.

     Y tercero, aceptar con gran placer, la invitación del Centro de Poesía de su institución para ir a los Estados Unidos a leer mis poemas.

     Sobre lo primero: He estado cambiando las direcciones muchísimo últimamente y el correo ha sido reenviado excéntricamente. Recibí su carta recién la semana pasada, pero aún así debí contestarle en seguida.

     Sobre lo segundo: Me siento extremadamente honrado de ser el primer poeta extranjero invitado que todavía no visitó los Estados Unidos, y me encanta. Durante un tiempo quise ir a su país y no podría haber mejor manera de hacerlo.

     Y sobre lo tercero: Me gustaría ir a Nueva York para la lectura a principios de 1950, probablemente en enero o febrero. Mucho me alegraría su padrinazgo y leer en otros lugares, incluso en California.

     Y ahora el lado financiero: Entiendo perfectamente que por ser ustedes una organización no comercial deban trabajar con un presupuesto modesto y estoy dispuesto a aceptar, aparte de mis gastos transatlánticos, los honorarios que ustedes consideren adecuados a mis lecturas en su sede de Nueva York. Debo, sin embargo, señalarle que no tengo dinero privado alguno y que llegaré a Nueva York sin nada y que, por lo tanto, debo conseguir inmediatamente dinero de otros arreglos organizados por usted. Yo soy muy ineficaz para arreglar los detalles financieros, pero veré a mi agente literario de Londres el mes próximo y le pediré que se ponga en contacto con Ann Watkins LTD., de Nueva York con quien está asociado: ella a su vez se pondrá en contacto con usted. Espero, también que Ann Watkins pueda arreglar algunos otros trabajos para mí, fuera de su patrocinio, como para que pueda traer algo de dinero de vuelta a Inglaterra. Menciono esto –el traer dinero de vuelta-  porque para poder ir a Norteamérica, tendré que rechazar acá algunos encargos literarios y radiales durante algunos meses. Y cuando vuelva a Inglaterra estaré más o menos empezando de nuevo, buscando libretos, etc. por aquí y allá.

     Espero no estar escribiendo muy confusamente: tengo gripe y estoy lleno de inyecciones.

     Me gustaría quedarme en los Estados Unidos unos tres meses. ¿Cubre eso la mayor parte de los compromisos? Espero que sí. Y espero que me conteste pronto.

     Y otra vez, excusas por esta respuesta atrasada, y muchas, muchas gracias por el honor que me ha hecho.

                                                                                                                          Suyo sinceramente,

                                                                                                                                               Dylan Thomas


(John Malcolm Brinnin, Esq.)

 

Casi todas las cartas escritas en el último trimestre de 1949 se refieren a sus preocupaciones de dinero. Se aferraba a su próximo viaje a Estados Unidos como a la última esperanza de liberarse de sí mismo y a su familia de las interminables preocupaciones. (Tenía ahora tres hijos, el menor, Colm, había nacido ese año.)

 

De Dylan Thomas Cartas (1981. Buenos Aires: Ediciones de la Flor. Selección y prólogo: Constantine Fitzgibbons. Traducción: Pirí Lugones. Tapa: Smoje. Primera edición 1971. Segunda edición: diciembre de 1981.)


https://nicolasdominguezbedini.blogspot.com/2019/08/amor-en-el-hospicio-poema-de-dylan.html

https://nicolasdominguezbedini.blogspot.com/2012/07/no-entres-docilmente-en-esa-noche.html

https://nicolasdominguezbedini.blogspot.com/2012/07/dylan-thomas-reads-do-not-go-gentle.html







Always You - "Black City Nights" (Official Video)

lunes, 24 de mayo de 2021

24 de mayo de 1980, Una fotografía y Postal, tres poemas del poeta ruso-estadounidense y Premio Nobel de Literatura en 1987 Joseph Brodsky (San Petersburgo, 1940- Nueva York, 1996) traducidos por Daniela Camozzi y Walter Cassara:

 










24 de mayo de 1980

 

A falta de bestias salvajes, desafié jaulas de acero,

tallé los días de mi condena y mi apodo de camastros y vigas;

viví junto al mar, mostré mis cartas en un oasis,

y cené trufas con pobres diablos vestidos de frac.

Desde lo alto de un glaciar contemplé medio mundo, todo el                 ancho

de la tierra. Dos veces me ahogué; tres dejé que escarbaran mi           médula

con cuchillos. Abandoné el país que me dio a luz y me crió.

Aquellos que me olvidaron poblarían una ciudad entera.

Atravesé las estepas que los hunos cabalgaron entre alaridos,

vestí los tajes que hoy, en todas partes, están otra vez de moda.

Sembré centeno, pinté con alquitrán los techos de chiqueros y           establos.

Tragué de todo menos agua seca.

Permití que en mis sueños infectos y húmedos entrase el tercer           ojo

de los centinelas. Mastiqué el pan del exilio: es rancio y                       verrugoso.

Di a mis pulmones todas las asonancias, salvo el aullido;

preferí el susurro. Ahora tengo cuarenta años.

¿Qué puedo decir de mi vida? Que es larga y abomina la                 transparencia.

Sufro si se cascan los huevos, pero ante una tortilla vomito.

No obstante, incluso cuando mi garganta esté llena de tierra

la gratitud seguirá brotando de ella.

 

                                                                                                                                                           [1980]

 

 

Una fotografía

 

Vivíamos en una ciudad color vodka congelado.

La electricidad llegaba de lejos, de los pantanos,

y por las noches la casa parecía

manchada de turba y picada por mosquitos.

La ropa era incómoda y traicionaba

la cercanía del Ártico. Al final del largo pasillo

sonaba el teléfono: volvía en sí de mala gana

una vez terminada la guerra.

El billete de tres rublos exhibía mineros y aviadores.

¿Cómo podía yo saber que algún día

todo eso dejaría de existir? En la cocina,

las ollas esmaltadas infundían confianza en el mañana,

transformándose tercamente, en mis sueños,

en cascos o ejércitos marcianos. También los coches

marchaban hacia el futuro: casi todos eran negros

o grises y a veces –los taxis– marrones.

Es extraño y poco agradable pensar

que ni el metal conoce su destino, que la vida

se entregó a una apoteosis de la empresa Kodak,

con su fe en las copias y el descarte de negativos.

Cantan las aves del paraíso, aunque no tengan

ninguna rama donde posarse.

 


Postal

 

Hay tanta gente en este país que polígamos y asesinos seriales

quedan libres de todo cargo y sólo se informan las tragedias                aéreas

(por lo general en el noticiero de la noche) si los aviones

caen en el bosque: las dificultades de acceso son más penosas

si vienen acompañadas de preocupaciones ecológicas.

Rebosan los teatros, tanto de público como de actores.

Nunca es un solo tenor el que canta un aria:

suelen ser seis al unísono, o uno tan gordo como seis.

Lo mismo puede decirse del gobierno, con sus despachos

activos toda la noche y turnos de trabajo como en fábricas,

prisioneros de los censos. Todo es pandémico.

Lo que adora uno es adorado por muchos,

sea por un deportista, por un perfume o por una bouillabaisse.

Así, hagamos lo que hagamos, seremos siempre leales.

Hasta la naturaleza ha tomado nota del común denominador,

y cuando llueve –algo poco habitual– las nubes no se quedan           tanto

sobre las bases del ejército o de la marina, sino sobre los                 cementerios.


De Joseph Brodsky Canción de cuna y otros poemas (2012. Buenos Aires: Huesos de Jibia. Segunda edición corregida y aumentada. Traducción de Daniela Camozzi y Walter Cassara. Postfacio: Walter Cassara.)


https://nicolasdominguezbedini.blogspot.com/2020/08/dos-breves-secuencias-del-poeta-ruso.html












sábado, 22 de mayo de 2021

MATE Y VENTANA, EXTRACTOS y DILEMA, tres poemas de Patricia Delmar (Buenos Aires, 1955 - 2011)…:

 




MATE Y VENTANA

 

un sorbo,

otro trago

y la tarde se aproxima

                                    clara,

apenas un ladrido

                                                    lejos

y un ciruelo

que sacude

                      perezoso

sus hojas,

mientras

su contorno danza

                                azulino.

 

 

EXTRACTOS

 

notas aceleradas

trazos

horas indispuestas

pulsos puntuales

nubes

               en fila india

palabras

               gorriones

recuerdos

               presentes

                       y ausentes.

 


DILEMA

 

¿dónde está el acierto,

la flecha justa

para alcanzar

el momento oportuno?

 

¿cómo llegar a la dosis exacta

                                         de las palabras

y sus derivaciones,

si los sentimientos

tironean y la razón corrige?

 

La misma ciudad

del encuentro

y el desencuentro

nos cita,

más allá del tiempo.


De Patricia Delmar Amarillo (2005. Buenos Aires: Otromodo. Texto de contratapa: Susana López Merino.)


http://nicolasdominguezbedini.blogspot.com/2012/11/noche-batida-un-poema-de-patricia.html





jueves, 20 de mayo de 2021

Dos textos de Philip Corner (Nueva York, 1933), que el compositor envió especialmente a Daniel Varela -especialista argentino en música experimental- para su incorporación en el libro “Philip Corner: Fluído y Forma”, de la colección Disonancias de la editorial Templo en el oído:

 






La Historia de mi vida comienza muy temprano.

 

Una clase de composición en la escuela secundaria

y comencé a escribir música.

 

Mi composición se interpretó ante la

(habitual) indiferencia de los estudiantes.

 

Y la crítica, no hostil del maestro (también lo habitual).

 

Pero al salir una chica me dijo:

“¡Guau! tu obra fue la mejor”.

 

Siempre escribí para esa chica.

 

Y siempre ha estado ahí.

 

[Escrito de 2015]

 


Trabajo de toda una vida

 

Nunca tuve una razón para creer que era alguien especial.

 

Mi regalo del Universo ha sido que se me permita vivir como músico.

 

He anhelado al menos un concierto por año y que eso fuera suficiente.

 

Trabajaría como ascensorista si hubiese tenido que hacerlo.

 

Pero cuando miro hacia atrás mi vida y leo mi curriculum parece

sorprendente.

 

…y cuando escucho la música que ha surgido de mí, resulta increíble.


De Daniel Varela Philip Corner: Fluído y Forma (2020. Buenos Aires: Templo en el oído. Traducción del prólogo , de las secciones “Corner por Corner”, “Conversaciones con Philip Corner” y “Entrevista a Caterina Gualco”, y de los pasajes en lengua extranjera citados en este libro: Daniel Varela).


https://nicolasdominguezbedini.blogspot.com/2021/01/philip-corner-fluido-y-forma-escrito.html

https://nicolasdominguezbedini.blogspot.com/2021/01/cena-blu-blue-dinner-philip-corner.html

https://nicolasdominguezbedini.blogspot.com/2021/01/philip-corner-meets-eric-satie.html





REA Video #149 - Pablo Reche (live)

ASCENSO EN MAYO, LENGUAJE, TESORO, ÁRBOLES y BERRYMAN, cinco poemas de William Stanley Merwin (Nueva York, 1927 - Haiku, Hawái; 2019) traducidos por Alberto Blanco [A.B.] y Pura López Colomé [P.L.G.]…:

 



ASCENSO EN MAYO

 

Ya todos mis maestros han muerto menos el silencio

Intento leer lo que los cinco álamos están escribiendo

En el vacío

 

                                   ***

 

De todas las bestias sólo al hombre la muerte otorga la justicia

Yo deseo

Hincarme ante una entrada vacía desde donde se escuche un canto

 

                                      ***

 

Quien hizo el tiempo también nos regaló a sus tontos

Tiempo ceñido en relojes con divisiones al gusto

Que cruzan las fronteras de reinos invisibles

 

                                       ***

 

Para alcanzar el éxito considera los hechos desde su pasado

Considérate inevitable y date crédito por ello

Si crees de pronto que has perdido la fe amplía el templo

 

                                      ***

 

A lo largo del día las estrellas innombrables pasan por la puerta

Las que vienen desde allá desde la muerte

Sin preguntas

 

                                          ***

 

Los muros de luz se estremecen y un búho despierta en el corazón

No puedo recurrir a las palabras

El sol va a ponerse en otra parte

 

                                             ***

 

Antes de caer la noche bajo la puerta vuelan pétalos incoloros

Y las sombras

Recuerdan a sus ancestros en la casa más allá de la muerte

 

                                              ***

 

Al final de su procesión por la piedra

Al caer

El agua recuerda cómo reír

 

 

                                                                                            [P.L.G.]

 


LENGUAJE

 

Hay ciertas palabras que son hoy de nuestro conocimiento que no usaremos nunca más, y que nunca olvidaremos. Las necesitamos. Como la parte de atrás de una pintura. Como el tuétano y el color de nuestras venas. Para estar seguros, las alumbramos con la linterna de nuestro sueño, y allí están, temblando ya por el día del juicio. Serán enterradas con nosotros y resucitarán como todos los demás.

 

                                                                            [A.B.]

 

TESORO

 

Al comenzar a cavar nos dimos cuenta de que no éramos los primeros. Con todo y nuestros conocimientos de historia, nos quedamos sorprendidos. Otros han cavado antes que nosotros. ¿Lo encontraron? ¿Se lo llevaron? ¿Cómo supieron que estaba allí? ¿Estuvo siempre allí? ¿Por qué? ¿Qué era en realidad? ¿Todavía está allí? ¿Qué pasó con ellos?

        Y esto, una vez más, es historia. Lo cual nos deja en la misma ignorancia.

        Seguimos cavando. Nadie ha estado aquí mañana antes que nosotros.

        Y cavamos a solas. El verdadero presente es el lugar donde sólo uno puede estar parado, y está parado allí por primera vez.

 

                                                                            [A.B.]

 

ÁRBOLES

 

Estoy viendo los árboles

Creo que son de las cosas que voy a extrañar más

De la tierra

aunque muchos de los árboles que he visto

ya no los puedo recordar

y si bien es raro que yo abrace a los árboles que veo

y nunca he sido capaz de hablar

con ninguno

los escucho tiernamente

nunca han sido tocados por sus nombres

han estado erguidos alrededor de mi sueño

y cuando tuve prohibido treparme en ellos

me acunaron en sus ramas.

 

                                                                            [A.B.]                      

 

BERRYMAN

 

Les voy a contar lo que me dijo

en los años justo después de la guerra

como la llamábamos entonces

la segunda guerra mundial

 

no pierdas tu arrogancia todavía me dijo

ya lo podrás hacer cuando seas viejo

pues sí la pierdes demasiado pronto

sólo harás de reemplazarla con vanidad

 

sólo una vez me sugirió

cambiar el orden acostumbrado

de las mismas palabras en un verso

para qué señalar dos veces la misma cosa

 

me sugirió que le rezara a la Musa

que me pusiera de rodillas y rezara

allí mismo en el rincón y lo decía

en el sentido literal de la palabra

 

era en los días antes de la barba y la bebida

pero ya estaba muy metido en sus propias ondas

y las navegaba con el mentón y la cabeza

inclinados como una balandra al garete

 

era más viejo que lo que las fechas decían

mucho más viejo que yo andaba en los treintas

y hablaba con un acento nasal afectado

que creo había adquirido en Inglaterra

 

por lo que toca a las publicaciones me aconsejó

que cubriera la pared con las cartas de rechazo

sus labios y los huesos de sus largos dedos temblaban

con la vehemencia de su visión sobre la poesía

 

me dijo que la gran presencia

que permite todo y todo lo transmutaba

en la poesía era la pasión pues la pasión

era el genio y él alababa el movimiento y la invención

 

apenas había comenzado yo a leer

cuando le pregunté cómo podía estar seguro

de que lo que uno escribe es realmente

bueno y me contestó que era imposible saberlo

 

es imposible nunca puedes estar seguro

te vas a morir sin saber de cierto

si algo de lo que escribiste valía la pena

y si tienes que estar seguro mejor no escribas

 

                                                                            [A.B.]


De W.S. Merwin Después de los alfabetos/Antología poética, 1952 -1993 (1996. México D.F.: Editores del Hotel Ambosmundos. Prólogo: Octavio Paz, W.S. Merwin y Alberto Blanco. Traducción y selección: Alberto Blanco y Pura López Colomé.)


https://nicolasdominguezbedini.blogspot.com/2013/01/muy-feliz-feliz-2013-continuacion-un.html





domingo, 16 de mayo de 2021

Rock Nacional (Bonus Track) -Carolina Rizzi & Omar Grandoso: piano, composición digital y mezcla-:

EL OJO DE MI PADRE y COMENTARIOS SOBRE LA POESÍA, dos poemas de la poetisa griega Eleni Bakaló (Constantinopla, 1921 - ¿?) traducido por Nina Anghelidis-Spinedi:

 


EL OJO DE MI PADRE

 

Mi padre tenía un ojo de vidrio

El domingo cuando estaba en casa sacaba del bolsillo

también otros ojos, los limpiaba con el borde

              de su manga

y llamaba a mi madre para que eligiera

Mi madre reía

Por las mañanas mi padre estaba de buen humor

Jugaba con el ojo en su palma antes de ponérselo y

decía que era un buen ojo

Pero yo no quería creerle

Me ponía un chal obscuro sobre los hombros haciendo

como que tenía frío pero era para espiar

Por fin un día lo vi llorar

No tenía ninguna diferencia con el ojo verdadero

 

(1954)



COMENTARIOS SOBRE LA POESÍA

 

El Ojo de mi Padre lo escribí hace exactamente

                veinte años

Mi padre tenía un ojo de vidrio

Mi amiga tenía un solo pecho

 

El domingo cuando estaba en casa sacaba del bolsillo también otros ojos, los limpiaba con el borde de su manga y llamaba a mi madre para que eligiera

Mi madre reía

Mi madre reía dulcemente, me imagino después de veinte años,

ya que ahora conozco la nostalgia de amamantar

 

Por las mañanas mi padre estaba de buen humor

Jugaba con el ojo en su palma antes de ponérselo y decía que era un buen

ojo

Colocaban armadura

En lugar de su pecho mi madre tiene, allí donde estaba el arco,

una fea cicatriz

Pero yo no quería creerle

¿Qué importancia tenía yo en su vida?

 

Me ponía un chal obscuro sobre los hombros haciendo como que tenía frío

pero era para espiar

La sombra que paseaba entonces por nuestra casa era yo

 

Por fin un día lo vi llorar

No tenía ninguna diferencia con el ojo verdadero

Mi madre ­–a decir verdad, en su lugar pongo a mi amiga–

tenía muchos otros motivos para llorar.

 

Sobre el aumento dije que tú

              debes aceptarlo

 

(1978)


De Poetas Griegas Contemporáneas 1930 – 1990 (1992. Santiago de Chile: Centro de Estudios Bizantinos y Neohelénicos Fotios Malleros/ Universidad de Chile/ Facultad  de Filosofía y Humanidades. Traducción directa del griego y notas de Nina Anghelidis-Spinedi. Introducción: Carlos Spinedi.)